-Valeria: ¡Ahora si he cumplido mi sueño, ahora soy feliz!
-Diego: ¡Valeria Altamirano, estas detenida por triple asesinato! (Dice mientras avanza hacia Valeria y la esposa sin que esta se resista mientras mira el cuerpo de Tania fijamente).
En ese momento, las chicas se avanzan sobre el cuerpo de Tania, arrojado en el suelo…
-Bárbara: Tania, ¡AGUANTA CARIÑO, AGUANTA!
-Marina: No puedes morirte Tania, ¡Aguanta, aguanta!
-Tania (Debilitada): No… Siento que ya no puedo seguir, chicas…
-Marina: ¡NOOO! ¡Tú vas a ponerte bien! ¡No te va a pasar nada!
-Tania (Moribunda): Chicas, nunca hemos tenido suerte, supongo que todo esto nos lo hemos ganado a pulso, hoy estoy aquí, al borde de la muerte, a punto de volverme a encontrar con él, con el amor de mi vida…
-Bárbara: ¡Tania, por favor, no te rindas, te van a curar!
-Tania: ¿Creéis que él estará ahí arriba?
-Marina: Claro que si, cariño…
-Tania: Esté donde esté, solo sé que quiero volver a estar con él…
-Bárbara: ¡NO, NO Y NO! ¡Tienes que ser fuerte Tania!
-Marina (Llorando): Tania, no, la vida no es así, tienes que ser fuerte…
-Tania (Mientras se va quedando sin voz): Sed felices, y disfrutad, porque ahora, voy a empezar a hacerlo yo…
En ese mismo momento, Tania cierra los ojos y deja caer su cabeza sobre la pierna de Marina…
Definitivamente, Tania acababa de morir tristemente, no había nada que hacer, ella acababa de poner un punto y final a su vida, asesinada por su propia madre.
La vida de Tania acababa de empezar realmente para ella, pensando, que en algún lugar del cielo, Arón la estaría esperando para poder avanzar juntos, hacia la felicidad eterna…
-Marina (Llorando desolada): ¡NOOOOOOOO!
-Bárbara (Desesperada): ¡TANIAAAAAA, NOOOOO, NOOOOOOO!
Las chicas estaban desoladas, destrozadas, desilusionadas y sin ganas de seguir adelante…
Una de las personas más importantes para estas chicas acababa de morir en sus brazos, mientras deseaba su propia muerte para poder reunirse con el amor de su vida, Arón Infante.
Era increíble, pero cierto, después de todo lo que había luchado por llegar hasta el final, Tania estaba muerta, o según su punto de vista, a punto de alcanzar la felicidad junto a Arón…
DÍAS DESPUÉS…
Comisaría de San Fernando: 7 de Abril de 2010.
-Juez: Hoy, 7 de Abril de 2010, Diego, comisario de la policía Madrileña anuncia la orden de detención de Valeria Altamirano…
-Diego: Anuncio, la justa y propiciada detención de Valeria Altamirano ante el juez de instrucción numero 8 de Madrid.
-Juez: Condenamos a Valeria Altamirano, a 48 años de prisión por triple asesinato, obstrucción a la justicia y realización de negocios peligrosos e ilegales.
-Diego: ¡Gracias Señor Juez! ¡Se lo comunicaré en estos momentos!
Diego, era el encargado de trasladar a Valeria Altamirano a la prisión vigilada de Madrid, pero antes, este propiciaría una conversación entre Valeria Altamirano y Natalia Altamirano, después de muchísimos años…
Prisión vigilada de Madrid.
-Natalia: Hola, Valeria.
-Valeria: ¿Qué haces tú aquí?
-Natalia: Tranquila, hace años que no nos vemos y esta vez seré muy breve…
-Valeria: ¡No quiero hablar contigo!
-Natalia: ¡Pero yo sí, y tienes que saber algo!
-Natalia: ¿Recuerdas cuando perdiste a tu hija y no la volviste a ver?
-Valeria: ¿Por qué me recuerdas eso, hija de puta?
-Natalia: Te lo recuerdo porque no la perdiste, yo te la robé, yo la hice pasar por muerta para que no acabaras con su vida, pero años después, has acabado finalmente con su vida, la vida de tu propia hija…
-Valeria: ¿De qué me estás hablando? ¡Estás loca!
-Natalia: No estoy loca, que sepas, que Tania, era tu hija, sangre de tu sangre, ella era la hija que un día pariste y yo te robe para años después devolvértela en el orfanato cuando tenía tan solo tres años…
-Valeria (Asombrada): ¿COMOOOOOOO?
-Natalia: Si, como lo oyes, yo era la que, un día de frio y lluvia dejé a Tania en la misma puerta de aquel tugurio de orfanato que tú creaste…
-Valeria: ¡No puede ser! ¡Es imposible! ¡Me estás mintiendo!
-Natalia: Aquí tengo las pruebas que lo demuestran, pruebas de sangre, fecha de nacimiento, nombre de padre y madre y la ficha de registro del hospital…
-Valeria (Observando las pruebas): ¡Tania es mi hija!
-Natalia: Era… ¡Te recuerdo que acabaste con su vida hace días!
-Valeria: No puede ser, no, ¡NOOOOOOOO!
-Natalia: Si, lo es, hoy vas a entrar en prisión hasta la fecha de tu muerte, por haber matado con tus propias manos, a esa hija que tantos años buscaste y a la que, sin saberlo, le has hecho la vida imposible…
-Valeria (Arrepentida): Como he podido hacer eso, ¡Sin darme cuenta!
-Natalia: Bueno, yo me voy, ya he hecho que recapacites, espero que te pudras ahí dentro mientras te reconcomes pensando en que has matado a tu propia hija, Hasta nunca, Valeria Altamirano.
-Valeria (Mientras Natalia abandonaba la celda): He matado a mi hija, ¡He acabado con la vida de una persona que llevo buscando años!
Y aquel, fue el final de Valeria Altamirano, encerrada entre rejas, mientras poco a poco se volvía loca pensando en que había matado a aquella hija a la que tanto buscó, Tania.
HORAS DESPUÉS…
-Sacerdote: Pueden ir en paz…
En ese momento en el que un cura finaliza el entierro de Tania, todos abandonaron tristemente el cementerio, excepto Bárbara, Marina y Diego, que se quedaron frente a la tumba de Tania.
-Marina (Melancólica): Me parece mentira estar delante de su tumba…
-Bárbara (Destrozada): ¿Recuerdas cuando entramos en el orfanato?
-Marina: Tan sólo éramos niñas sin futuro, y fíjate ahora, ella ha acabado peor…
-Bárbara: Aún recuerdo esas risas, esas bromas, esa forma tan directa de decir las cosas, ese carácter tan duro que a veces mostraba, esa mirada tan transparente con la que, con una mirada nos mostraba sus sentimientos…
-Marina: ¿Recuerdas cuando salimos del orfanato?
-Bárbara: Tan sólo éramos unas chicas asustadas y decididas a abandonar aquel calvario al precio que fuese…
-Marina: Aún recuerdo cuando nos prohibió prostituirnos por primera vez, cuando nos contó que se había enamorado, cuando fuimos a esa fiesta que nos abrió las puertas de un mundo espantoso, cuando traicionó a Arón, cuando se casó con Julio, cuando comenzó a enfrentarse a Rafael sin miedo…
-Bárbara: El final te lo puedes reservar, por culpa de aquellas personas, Tania está muerta.
-Marina: ¿Por qué se empeñaron en hacerle tanto daño? ¿Qué mal hizo ella?
-Bárbara: Su único pecado fue amar, amar al hombre equivocado…
-Diego: Quizás fuera el hombre equivocado, pero ese hombre hizo lo imposible para salir de un negocio que, finalmente, lo llevó a la muerte, y todo por ella.
-Marina (Mirando hacia la tumba): Tania, jamás te vamos a olvidar pequeña, porque tú fuiste la más pequeña, pero la más grande dentro de nuestros corazones.
-Diego: Chicas, voy saliendo para arrancar el coche, os espero fuera.
-Marina: Enseguida vamos, mi amor…
-Bárbara (Mientras ve como se aleja Diego): Jamás podremos levantar cabeza de este duro golpe, Marina…
-Marina (Levantando la cabeza mientras mira a Bárbara): Si seremos capaces, y lo haremos por ella, para cumplir su última voluntad, que fuésemos felices…
-Bárbara: ¿Podremos sentir felicidad sabiendo que ella ni siquiera puede llegar a sentir?
-Marina: ¿Quién te ha dicho que ella no está sintiendo ahora mismo?
-Bárbara: Eso espero, que pueda ser feliz esté donde esté.
-Marina: Lo será, porque por fin, los dos, están juntos para siempre.
En ese momento, miran hacia la tumba de Tania, que está situada justo al lado de la tumba de Arón Infante.
-Bárbara: Así es, juntos para siempre…
Las chicas lanzan un beso a Tania mientras se van alejando de las lapidas, tristemente van saliendo del cementerio mientras a sus espaldas, dejan descansar en paz a la verdadera protagonista, a la verdadera desdichada de esta historia, Tania.
FIN…
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